la cantautora mexicana Julieta Venegas es una de las protagonistas del increíble movimiento que por estos días sacude a los escenarios cubanos
Luego del concierto en el Teatro Nacional, con el que encantó al auditorio este lunes, la artista, Embajadora de Buena Voluntad de la UNICEF, participó en un panel contra la violencia a mujeres y niñas en la Casa del ALBA Cultural.
Julieta compartió con estudiosos del enfoque de género, feministas y público en general, sus ideas sobre la importancia de la lectura y de inculcar valores en los hijos desde edades tempranas para contribuir a construir una sociedad más justa y sin violencia.
De esta temática y sobre sus impresiones durante su visita a la Isla, la cantante de Eres para mí yLimón y sal conversó con Cubasí.
—¿Cuánto sientes que ha incidido esta misión que tienes en la campaña contra la violencia a mujeres en tu vida personal y en tu carrera?
—Para mí es como una búsqueda diaria. Primero sientes que te sensibiliza y ya hoy para mí es como algo crucial. Es un trabajo diario, la gente tiene que cambiar su manera de pensar, no es algo lejano, como les parece a muchos. Hay mujeres que ni siquiera saben que son violentadas porque no se trata solo de la expresión física, la violencia viene también desde lo sicológico. Y hay que tratar de construir las relaciones de pareja desde otra visión. El respeto debe estar en todos los niveles: la familia, los amigos, el matrimonio…
—México es un país de mucho machismo y violencia; más allá de las campañas que pueden hacerse, ¿qué crees que falta?
—En México mueren mujeres todos los días y muchos de los casos no se denuncian, prácticamente no hay detenidos. Eso habla mucho del problema que tenemos como sociedad y de la necesidad de trabajar más. Hay un buen trabajo de feministas y artistas, pero aún queda un largo camino por recorrer.
Desde la cultura hay que apoyar en todo lo que podamos. Los artistas jugamos un papel muy importante y nuestra participación en actividades como esta genera un cambio de imagen sobre las mujeres. Hay que dar un giro en la cabeza de los individuos.
—¿Qué piensas que puede salir de esta visita a Cuba, más allá del concierto y el encuentro contra la violencia?
—Creo que podemos hacer más proyectos como este aquí o en México. Lo importante es integrar a más hombres, este es un trabajo de todos, no solo de mujeres. Hay que celebrar nuestra diversidad, lo que somos… y hacer una vida más de respeto, de comprensión y amor.
—Anoche fue un concierto muy especial en el que pudimos verte con músicos cubanos como Rochy y Santiago Feliú. ¿Con qué otros artistas cubanos te gustaría compartir?
—Me encantó esta vez compartir con Rochy porque fue una de las personas que conocí cuando vine por primera vez a Cuba hace 12 años. También hay un montón de gente joven que me apasiona como Descemer Bueno, soy fan de él; Haydée Milanés estuvo en México y conocí su voz y su manera de vivir la música, que es hermosa. Me encantaría ver más músicos cubanos conmigo en México.
—¿Qué te ha parecido Cuba después de 12 años?
—Me encantó volver, la verdad. La gente aquí tiene otra manera de vivir. Siento que la gente joven tiene ganas de hacer muchas cosas y «está muy padre» el ambiente aquí.
—Vienes de una familia de fotógrafos, imagino que eres aficionada a este arte. ¿Cómo ves una foto de La Habana?
— (Risas) La verdad es que no soy tan visual como mis padres. Ayer tomé una foto que me gustó mucho. Fue antes de pasar a una entrevista y me estaban maquillando, era como una clase de maquillaje mientras me arreglaban… y había tantas chicas alrededor mío que se me hizo muy lindo, parecían mis coristas… me encantó esa imagen.
—¿Y si le hicieras una canción a Cuba?
—Me gustaría poner todas estas buenas experiencias en una canción. Yo me quedaría un par de meses más aquí para seguir sintiendo el carácter de los cubanos, que es tan especial. La gente es siempre bonita. Sí, lo pondría en una canción, pero tendría que estudiar a las personas por más tiempo aquí.
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