LA PAZ.— El liderazgo de Evo Morales permitió el surgimiento de un gobierno de los movimientos sociales y la derrota del neoliberalismo en Bolivia, destacó el miembro del secretariado del Partido Comunista de Cuba, José Ramón Balaguer, en la clausura del Foro de Sao Paulo.
Balaguer, jefe del departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central del Partido, destacó que “el país que ahora nos acoge en este XX encuentro del Foro de Sao Paulo se ha erigido en ejemplo para toda la región”.
Para el dirigente cubano, el valeroso pueblo boliviano, se ha convertido en protagonista de un proceso de cambios profundos, colocando al país en los primeros puestos de la región en materia de recuperación de sus recursos naturales, redistribución de la riqueza y antiimperialismo.
“El proceso de cambio en Bolivia constituye una verdadera Revolución Democrática y Cultural que ha desterrado 500 años de colonialismo, y es considerada como la más profunda de su historia”, insistió.
Para Balaguer, con el liderazgo del presidente Evo Morales, Bolivia “recuperó la soberanía sobre sus recursos naturales, redistribuye su riqueza y mejora las condiciones de vida de los sectores populares y trabajadores, asumiendo abiertas y claras posturas antiimperialistas e iniciando con ello un cambio de época en Bolivia”.
Reiteró asimismo la política solidaria y de cooperación de Cuba “con el gobierno y el pueblo boliviano, con sus organizaciones sociales y fuerzas políticas que conducen y apoyan los cambios y con el liderazgo del compañero Evo Morales Ayma”.
Por otra parte, Balaguer afirmó que la contraofensiva del imperialismo y las derechas ha seguido desarrollándose con fuerza, y denunció que “estas políticas han asumido métodos de guerra no convencional, término acuñado por el Departamento de Defensa norteamericano”.
El referido término, explicó, “alude a la conjugación de tácticas de subversión política e ideológica con acciones de guerra y acoso económico, desestabilización, violencia y si las condiciones lo sugieren, incluso a una intervención militar externa”.
El dirigente cubano insistió en que “la historia demuestra que aunque difícil estas estrategias pueden ser enfrentadas y derrotadas” y enumeró los factores a tener en cuenta para lograrlo.
Entre esos puntos, destacó que las fuerzas políticas y sociales que sostienen y conducen los procesos progresistas y de izquierda deben encontrar con urgencia la unidad indispensable a través de un programa político que priorice objetivos comunes.
También insistió en que “la izquierda latinoamericana y caribeña necesita aumentar y sistematizar los canales de cooperación, siendo el Foro de Sao Paulo el espacio más maduro, donde más se ha avanzado para lograr estos indispensables propósitos”.
Por último, pidió la consolidación de los procesos de concertación política y de integración entre nuestros estados sin la injerencia norteamericana.
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